Buenos propósitos para el Año Nuevo

1. Protagonizar una performance ayaliana.

2. Participar en los concursos de la Biblioteca.

3. Enviar mis creaciones (relatos, poemas, cómics, chistes…) a elmaguillo@gmail.com .

4. Actuar en un film de Bernipaco.

5. Leer… ;-)

6. Enviar los disparates ajenos al blog de El Maguillo .

7. Visitar a diario fotopalabres.blogspot.com .

8. Colaborar en Páxina una vez al trimestre.

9. Comprar El Maguillo 14 y recomendarse a mis amistades.

10. No hacer caso de estos ni de otros buenos propósitos y disfrutar el 2009.

FELIZ NAVIDAD

La crisálida

Blanca memoria

Antes de esta Navidad hubo otras navidades, algunas que ya empiezan a perderse en el piélago del olvido y otras más recientes que van acumulándose en la memoria algo cansada ya de soportar el peso del pasado. Pero hoy, puesto ya el pie en el estribo para salir galopando hacia otras tierras lejanas donde viven los recuerdos, resucitan imágenes, antiguas fotografías desvaídas…: los preparativos de la Nochebuena en mi casa familiar (tortas de anís, mantecados, cordiales…), la pandilla de amigos y de amigas (guateques, amoríos platónicos, ronda de villancicos por las calles, pandereta en ristre y guitarra en cabestrillo), el coro parroquial cantando en la misa del gallo (nos atrevíamos a tocar con guitarra eléctrica y batería, a pesar de las protestas de nuestro párroco preconciliar), la complicada y excitante preparación de la Nochevieja (buscar el local, comprar el avituallamiento, seleccionar la música –muy importante, sobre todo la de bailar “agarrao”-, adecuar la iluminación –zonas de luz para danzar, zonas de sombra para intimar-, elaborar la lista de invitados y de invitadas…), y, por fin, la mágica noche de Reyes, la noche por excelencia para soñar y esperar con ansiedad los regalos (nunca llegué a sorprender a los “reyes”, aunque creí escuchar sus “caballos”). ¡Qué nervios, qué sorpresa, qué maravilla descubrir en la penumbra los juguetes, sobre todo los que uno no recordaba haber pedido en su “carta” a los magos de Oriente!

No conozco bien el imaginario de los jóvenes de ahora, la fantasía que nutre sus ilusiones. Ayer escuchaba en la radio que pasarán gran parte de la Navidad enganchados al ordenador o a la play station (“mucho ratón y poco turrón”, decía la locutora), relacionándose virtualmente con su “pandilla” por el Messenger. Mientras escribo estas líneas aprovechando una guardia con alumnos de 2º de ESO, como ya no tienen nada que estudiar, les dejo en libertad para que se entretengan y ¿qué se les ocurre? Pues nada más y nada menos que fabricar unos proyectiles de papel y arrojárselos con auténtica fruición, con verdadero azogue de adolescentes que aún no han despegado de la infancia. ¡Pero hay que ver cómo se lo pasan, cómo se divierten! Enfebrecidos en su juego no reparan en mis tímidas amonestaciones para que no armen demasiado escándalo. Me gusta verlos jugar con estos humildes y toscos artefactos elaborados con sus propias manos y emanados de su todavía fértil imaginación. En el fondo, somos los mismos niños, los mismos jóvenes de antaño, ahora vestidos de otra manera (no tan diferente, a decir verdad), dotados de otra jerga (código de distinción, como hacíamos nosotros para distanciarnos de nuestros mayores), avezados en las nuevas tecnologías, pero con las mismas ansias, el mismo ardor, los mismos estímulos. ¡Ah, la blanca memoria que algún día retornará a la blanca orilla de donde zarpará otra vez la nave! Y el mismo deseo, unánime, universal, inmutable: ¡FELIZ NAVIDAD Y PRÓSPERO AÑO NUEVO!

Paco Ayala Florenciano

Y sigue, y sigue, y sigue...

Iniciábamos ayer una semana intensa: esperamos la visita de un poeta (que no sabe la que le espera); está convocada una reunión vespertina (nuestro Noticiero “publica” su primer ejemplar); llegan las evaluaciones, con sus resultados y notas, después de los últimos exámenes y, al cierre de la presente edición, aparecen aquella entrevista tan añorada, colaboraciones inesperadas, nuevas fotos, una impresionante crítica pictórica, contribuciones “de cine” y una propuesta futura la mar de interesante…

No os perdáis nada. Y mucho menos los suculentos disparates de esta semana: ¡no tienen desperdicio!

Mono-grafías Dispara-patadas de ayer y hoy presentan: La luz.

Nunca pensé que el conjunto de radiaciones que emite el Sol o Viento solar, más conocidas, coloquialmente, como “la luz”, dieran para tanto. He tenido alumnos que hablaban de…

“el Soplo Solar que permite la vida” (versión científica del Soplo Divino);

“los rallos inflarrojos que calientan el mundo” (o la política radicalizada como forma energética);

“los rayos ultravioletas que dan cáncer fácil” (o el cáncer de rebajas gracias al cabreo solar);

“los rayos X que te ven desnudo” (¡esos rayos son unos degenerados mirones!);

“los rayos gamba” (estos deben de dar hambre).

Con la luz, los colores y la visión también hay sorpresas:

“La luz es la más veloz del mundo por eso sólo va en recto.” (¡Como para tomar una curva a 300 000 km/s!)

“Está hecha de 9 colores que se separan si llueve.” (El arcoiris supergordo pero de mala calidad: destiñe con la lluvia.)

“Sólo vemos los colores que rebotan en las paredes y nos entran por el ojo.” (Pues menos mal que no son todos… Aun así, ¡qué daño!)

“Si metes un palo en el agua nuestro ojo lo parte de mentira.” (¡Ah!, menos mal que no es de verdad, pues ¡qué dolor!)

“De cerca ves miopía y de lejos lo contrario.” (Ya no sé lo que veo.)

“En los ojos todo está al revés pero luego lo gira la cabeza.” (¡Claro! Por eso, se cuelgan de los pies los murciélagos.)

“Hay bichos que ven la oscuridad con orejas especiales.” (Pues no, ya no sé lo que ven los murciélagos.)

“Los platónicos no ven bien los colores.” (Estos filósofos siempre en blanco y negro.)

“En un agujero negro entra todo el mundo pero no sale ni la luz.” (Eso va a ser una macrodiscoteca con todo el mundo ciego.)

“La gravedad y el tiempo pueden doblar a la luz.” (Sobre todo el tiempo: puede con todo, ¡palabra!)

Y podríamos seguir hasta el infinito y más allá, pero aquí lo dejo.

NOTA: Puede que algún testimonio esté deformado por el tiempo (como la luz, ¿vale?).

Por el ¿profe? Mil’líos

La crisálida


VIOLENCIA

Les pregunto a mis alumnos qué tema de rabiosa actualidad les interesa para escribir sobre él. Me responden que la violencia policial y callejera cuyo epicentro se ha situado esta vez en Atenas con alguna réplica en la capital de España. Ellos, por lo que me dicen, están indignados por la muerte –para unos accidental; para otros provocada- de un joven griego de 15 años a causa del disparo de un policía que –según su versión- se vio obligado a hacer uso de su arma reglamentaria al verse acosado por un grupo de encapuchados. El resto de la historia ya es sobradamente conocido a través de los medios de comunicación: manifestaciones, disturbios, bombas incendiarias y piedras contra edificios oficiales, bancos y comercios… Un panorama desolador y preocupante, suma y sigue de la crisis que azota la economía mundial.

¿Está justificada la violencia en casos como éste? ¿El fin justifica los medios?

Ahí queda la pregunta, que si he de responderla yo, lo haría en los siguientes términos: la violencia es el último camino que hay que tomar siempre, y sólo cuando se trata de legítima defensa. Antes, mucho antes y en todo caso hay que recurrir al diálogo, a la manifestación reflexiva, sosegada y serena de la palabra. Palabra verdadera y contundente si es preciso, pero palabra al fin y al cabo que respeta, escucha y argumenta. Ya lo decía el poeta Gabriel Celaya: la poesía es un arma cargada de futuro / poesía necesaria, como el pan de cada día… No hace falta destrozar mobiliario urbano (que pagamos entre todos los contribuyentes), romper escaparates e incendiar comercios (más leña al fuego de la alicaída empresa) ni enfrentarse con las fuerzas del orden para hacer valer nuestros derechos, para hacer oír nuestra voz, para elevar nuestras protestas por lo que consideramos injusto. Antes, mucho antes, hay un espacioso camino –en el que todos cabemos- para la negociación, para el encuentro, para la paz y la concordia. Y no es palabra vana, no es utopía evanescente. Es palabra consagrada por las constituciones de todos los países democráticos. Lo más fácil y lo más insensato es echarse a la calle y emprenderla a golpes contra todo lo que se mueve (y más aún contra lo inerte), para descargar nuestra ira, la represión acumulada como en una olla a presión y nunca convenientemente canalizada. Obviando así el mejor de los recursos posibles, el más elemental, al alcance de todos y a la medida de todo ser humano: la palabra, el discurso constructivo y armónico de la razón que lo ilumina.

Paco Ayala Florenciano

Una semana más

Una semana más os informamos de cómo va la tarea de nuestro Taller de Prensa y también la elaboración de la revista del Centro: no dejan de llover disparates (tantos que esta semana editamos un monográfico de Literatura y nos queda material abundante para las próximas), también llegan algunas noticias; estamos elaborando la entrevista que le vamos a hacer a Francisco Álvarez Velasco, el poeta que nos visitará la semana que viene; seguimos buscando imágenes para ilustrar nuestra encuesta más comprometedora; el arte ya ocupa un lugar destacado en nuestra mirada crítica; pronto conoceremos cuál es la "crisálida" preferida del mes de noviembre; el cine comienza a tener también su pequeño lugar...

Disparates: monográfico literario

Aquí tenéis los disparates literarios medievales más actuales:

El cantar de Mio Cid fue publicado en 1499 en casi su totalidad por un tal Per Abbat.”

“El Cid, perteneciente a la corte de Felipe VI es desterrado por el rey debido a falsas acusaciones.”

“La composición métrica del poema está formada por catorce sílabas, alejandrinos, donde destacan mucho los pleonasmos y su rima es asonante, se trata de una cuaderna vía.”

“El cantar de mio cid es el poema epico que fue mas censurado.”

“El poema exalta la figura del Cid, tambien posee una buena mesura.”

“El cantar deMio Cid se forma cuando la poesia épica en el siglo XV cuando estabamos en la época teorecentrismo.”

“Es una historia que narra que un soldado que se llamaba el Cid luchaba en España contra los moros que ententaban conquistar España. En una de las multiples batallas el Cid es abatido y para que su ejercito no perdiese la moral tuvieron la idea de atarle al caballo para que pareciese que estuviese vivo y así sus soldados lucharon con valentia y honor y ganaron esa batalla y echaron a los invasores de España con el paso de los años.”

“El Mester de clerecía fue formado por clérigos. Se creó la tirada, que eran versos irregulares, de rima asonante. Este Mester consistía en alabar a Jesucristo, se reunían para orar, pues eran muy católicos.”

“En la introducción, Berceo se presenta como un romero, que entra en un campo de amor llamado locus amoneus. Hace alegoría de nuestra señora. La segunda parte, consta veinticinco poemas copiados, de otras obras, un poco modificados, en los que se muestran el poder de nuestras señora virgen, que tiene para la salvación y la importancia en esa época. En este poema defienden la compatibilidad que hay entre el amor a Cristo y el amor a una mujer.”

Como veis, no tienen nada que envidiar a aquellos “cotilleos” sobre La Celestina, que publicamos en El Maguillo, 10:

“Es una comedia dramática y constituye una novela humanista y tiene un final trájico.”

“Fue publicada por primera vez en 1499 y su última edición es de 1502.”

"En un principio se hizo la Comedia de Calisto y Melibea, que constaba de 16 actos dividos en hemisquios y separados por pausas."

"Un día Calisto subiendo al balcón de Melibea se cayó de la escalera y murió. Pleberio termina cantando al final de la obra."

“Todos sus versos son de ocho estrofas, menos uno que es libre.”

La crisálida

LA LENGUA VIVA

A punto ya de culminar los exámenes correspondientes a la 1ª evaluación del curso, se me ocurren ciertas reflexiones acerca de lo que enseñamos en las aulas y de lo que se examinan nuestros estudiantes.
Cuando yo estudiaba la cosa estaba muy clara: un profesor (casi no había profesoras en el Bachillerato, ahora la Secundaria) explicaba un tema en clase que ya estaba explicado en el libro de texto o bien, si el profesor así lo decidía, lo dictaba para que lo copiáramos en nuestra libreta. Al día siguiente, era muy probable que el mismo profesor te sacara a la palestra (a la pizarra, a la tarima...) para preguntarte dicho tema de memoria y ¡ay de ti si no te lo sabías punto por punto! No importaba tanto tu entendimiento acerca de él cuanto tu capacidad retentiva para recitarlo al pie de la letra. Por supuesto, este ejercicio memorístico se aplicaba también a los exámenes escritos, que es donde realmente cobraban valor definitivo e irrevocable las calificaciones.
Luego llegó la reforma (la primera de una serie interminable) y me pilló a mí de profesor. Y yo -ingenuo de mí- ya creía que con ella se daba por finiquitado el antiguo régimen educativo y se daba paso -al fin- a lo que consideraba los auténticos valores pedagógicos: la imaginación, la creatividad, el aprendizaje constructivo... Y así fue durante un corto periodo de experimentación. Pero, como suele ocurrir en esta España de arranque de caballo y parada de buey, todo fue agua de borrajas y lo que parecía el comienzo de una nueva era verdaderamente revolucionaria en metodología didáctica, en enseñanza útil, comprensiva y moderna, acabó por convertirse en una contrarreforma retrógrada, papel mojado. Mi gozo en un pozo, como suele decirse.
Y si no, no tenéis más que revisar los actuales currículos de la ESO y del Bachillerato, o los libros de texto (más de lo mismo: temario y memoria) y los materiales que normalmente usamos para impartir nuestras clases, que siguen siendo sustancialmente tiza, borrador y pizarra. Los cacareados ordenadores se usan muchas veces -salvo honrosas excepciones- para tener entretenido al personal y ocupar horas lectivas terminales que, de otra manera, nos resultarían un tanto pesadas y conflictivas. El uso de las nuevas tecnologías en la enseñanza ofrece al alumnado motivación y aprendizaje rápido, ameno e intuitivo (el clásico docere delectando) y descarga al profesor de la pesada cruz de la clase magistral, pero todavía está lejos de ser una realidad cotidiana, eficiente y segura en la vida académica; así que, ante el miedo a la falibilidad técnica, además del cuantioso trabajo añadido que conlleva fuera de la jornada laboral, la mayor parte del profesorado opta por regresar al sistema tradicional del libro de texto o la fotocopia a lo sumo. Nuevamente el miedo a lo desconocido, el miedo a la libertad. No sólo del colectivo docente, sino -y ahí me duele aún más- de la propia Administración que prefiere -para evitar problemas y mantenerse en el poder- lo malo conocido a lo bueno por conocer.
Y mientras tanto, nuestros jóvenes estudiantes, ávidos de aprender (aunque prefiramos no creerlo para justificar nuestra inercia acomodaticia), de descubrir, de experimentar, de sentirse útiles y protagonistas de su propio proceso discente, siguen esperando con paciente aburrimiento que alguien, algún día, en algún lugar, abra una ventana de aire fresco a la vida que vive afuera, libre de las ataduras claustrofóbicas del currículo oficial.
Termino con una cita genial de Juan de Mairena, el alter ego de Antonio Machado:
...Procurad, sobre todo, que se no se os muera la lengua viva, que es el gran peligro de las aulas.
Paco Ayala Florenciano

¡A toda máquina!

Hemos concluido el vaciado de la encuesta (qué sorpresas se lleva uno); tenemos las primeras ilustraciones originales, imágenes nuevas para nuestros reportajes y cada vez más disparates.
Hemos asistido a la performance "A solas con mi sombra y con mi pena" , a cargo de los alumnos de 2º de Bachillerato, dirigidos por Paco Ayala; aunque la periodista que debía curbrir la noticia no llegó a tiempo (retenida por las fuerzas del orden).
Hemos publicado la que será nuestra primera encuesta virtual, en busca de "La crisálida" que queremos que se convierta en mariposa en nuestro maguillo de papel.
Y esto es sólo la continuación del comienzo...

Más disparates

"Monday, 1st December..." escribió el alumno, dejando incompleta la fecha porque aseguraba que no sabía escribir los números en inglés. La Teacher no salía de su asombro viendo que sólo le faltaba por poner el año.

Contado por una alumna: "Estábamos viendo unos exámenes y el profesor dijo: "Te bajo un punto por las faltas, chico, era se escribe sin "h", o sea, del verbo ir."

Pregunta de examen: "¿Conoces las diferencias entre la teoría de la Deriva Continental de Alfred Wegener y la Teoría Tectónica de Placas?".
Respuesta del alumno: "Sí."
Reflexión del profesor: "Eso te pasa por preguntar tonterías."

"Velázquez, arquitecto asturiano que construyó mucho en el Naranco (Oviedo)."

"¿Qué es tecnología?
La asignatura que me da la profesora Esther en clase."